No tengo idea si será bueno o malo escribir con rabia. En el instante mismo en que acaban de sacarte de tus casillas. No lo sé. Lo único que se es que el haberlo hecho, me limpió. En el momento en que me senté a escribir ultra enojada, sentí que con el movimiento rápido de mis dedos sobre el teclado plasmando todo el vómito de ideas que hasta entonces no había escrito, me liberaba de muchas cosas, entre ellas del sentimiento de odio que en ese instante me invadió, y me hizo querer matar a todos los que estaban al lado mío. Fue liberador, si, esa es la palabra. Vuelvo a insistir, no se si escribir con rabia sea bueno, tal vés se exageran algunas cosas. Pero en el fondo no hay nada de lo que allí escribí, que sea mentira. Así es tal como pienso, y ahora al volver a leerlo puedo sentir ese grito escondido en las palabras que allí están. En fin, siento que alomejor no fue muy bueno el haberlo hecho, porque quedaron en evidencia muchas cosas que no se habían mostrado de mí, pero en fin...no me arrepiento de nada. Esta soy yo, así me gusta ser, y como siempre digo, aún soy una mujer en construcción.