Sin Respiro

Cómo hablar de tantas cosas
sin nombrar ninguna de ellas...

Puedo hablar de la muerte, de las sombras,
del dolor, de la pasión, de la libertad...
de las cosas simples y las no tanto
de los gatos que me miran,
de los golpes que me he dado,
de tus labios partidos,
y de tantos juegos perdidos...

...Y así no estaría hablando de nada, ni de todo...

Tengo pocas ambiciones,
hoy solo sueño con ser libre
volar más alla de esas cadenas
que mantienen tu mente presa...

Hoy no quiero dar explicaciones,
ni pensar por qué lo hago,
sólo anhelo seguir sintiendo,
que esta Vida es mía y sólo mía,
sin consecuencias que no deseo...

Me intrigan las personas,
y sus tantas complejidades,
no comprendo porque confian,
en quien no deberían...
Disimulo mi inquietud,
con coraza de fuego y plata,
no deseo ser descubierta,
escondida entre las malezas...

Me interesan pocas cosas,
aprendo por experiencia,
en estos instantes me quedaría
sin respiro,
quietecita entre las sábanas...

Nada espero, nada sueño
y lo hago a la vez,
nada quiero y si lo hago
jamás te lo diré.

El círculo perfecto entre las olas del mar,
los árboles sin hojas,
los atardeceres grises,
la piel manchada de tinta,
tus manos en mi espalda,
el reloj que no hay que mirar (nunca),
de todas aquellas quiero hablar
y no tener nada que contar...