Arraigado a mis raices, crezco de manera ascendente sin olvidar quien he sido.
Me mantengo firme y dispuesto, mas no le temo al frio del universo eterno...
Mis brazos alargan la idea de alcanzarlo todo, renuevo mi piel en el tiempo y sigo volviendome rígido...aunque el viento aun menea mis hojas...
Pertenezco a este mundo, concreto, plasmado, manifestado en el aqui y ahora, moriré un día, no soy trascendente, soy el primero de los siete y aunque el mas presente, el menos importante....
Se dejan engañar por mi imponente forma, mas no soy mas que un reflejo de la verdadera fuerza...que se mantiene escondida en mi interior...donde todo comienza, donde todo termina...
Unos me cuidan demasiado, no saben que sólo soy una cáscara; mi verdadero tesoro se encuentra oculto...apariencia que se esfuma, cuando alguien me corta desde abajo...desangrandome y enterrandome nuevamente bajo mi mismo...esperando las horas y estrellas suficientes para volver como una pequeña semilla, quizas en otro suelo, quizas en otro karma...
Como yo hay miles, pero la mayoria no conoce su real identidad...se conforman con reflejarse en el espejo que produce el agua y embellecerse para los demás; olvidando lo esencial, olvidando que la forma muere, olvidando quienes son...
Me sé pasajero, vehiculo para lo real...el primer eslabón de la cadena en espiral...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario